Las memorias del sobreviviente más joven de la Lista de Schindler

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El chico_sobre_la_cajaLeon Leyson tenía apenas 10 años en 1939. Recién a los 19, pudo rehacer su vida: le habían robado su adolescencia completa. Aun así, nunca se rindió, aguantó y perseveró.

Por: Jorge Consuegra/ Bogotá.

Sobre el holocausto se han escrito libros, enciclopedias, tratados, miles de ensayos, novelas y hasta se han rodado decenas de películas sin agotarse aún las imágenes de lo ocurrido en Alemania en la década de los cuarenta del siglo pasado. Pero aunque no se crea, los libros siguen saliendo como este, El chico sobre la caja de madera de León Leyson (V & R), que son las memorias del sobreviviente más joven de la Lista de Schindler.

Es un testimonio sobrecogedor, especialmente porque fue escrito con el recuerdo de los doce años en Cracovia cuando los alemanes empezaron a invadir la ciudad y los judíos empezaron a ser maltratados como parias.

Leyson utiliza un lenguaje de una enorme ternura, cargado de inocencia desde el vértice de sus doce años, sorprendiéndose de todo, de las vidrieras de la ciudad a la que acaba de llegar con su familia, de cómo los uniformados alemanes se tomaron la ciudad y abusaron de su poder, de cómo se hacía para sobrevivir en medio del caos.

Un libro muy, pero muy bien escrito y que dan ganas, sin lugar a dudas de volverlo a leer una y otra vez.

El Chico_caja_de_madera

Sobre el libro:

El chico sobre la caja de madera. Memorias del sobreviviente más joven de la lista de Schindler

Leon Leyson/ V&R Editoras/ 192 Páginas

Cuando sobrevivir parecía imposible, él lo logró.

El chico sobre la caja de madera describe la vida de un niño judío antes y durante el Holocausto. Y también algo que nadie había relatado muy bien hasta ahora: los años posteriores al final de la Segunda Guerra Mundial.

-Después de Anna Frank, es el mejor testimonio de un niño que atravesó la Segunda Guerra Mundial.

-Son las únicas memorias de un chico rescatado por Oskar Schindler.

-Para salvarlo y poder llevarlo a trabajar a su fábrica, Schindler dijo que el pequeño Leon era indispensable, ya que era el único que, por su tamaño, podía accionar una palanca que ponía en marcha una máquina en particular. Para ello, el niño se paraba arriba de una caja de madera y desde allí accionaba la palanca.

Leon Leyson tenía apenas 10 años en 1939. Recién a los 19, pudo rehacer su vida: le habían robado su adolescencia completa. Aun así, nunca se rindió.

-Su relato nos permite conocer también qué pasó con los sobrevivientes del Holocausto, en los años posteriores. Sus terribles condiciones de refugiados, las penurias que tuvieron que atravesar, los esfuerzos por armar una vida nueva lejos del horror.

-Una historia donde se destacan valores fundamentales, como el coraje, la dignidad y la resistencia de este chico, que a lo largo de su relato cuenta, entre otras cosas, cómo se las ingenió para salvarse varias veces de una muerte segura.

-Un relato de supervivencia, de gran valor histórico y humano, que vale la pena conocer y difundir.

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